Evangelio y palabra del día 13 diciembre 2024

Lectura del libro de Isaías

Is 48, 17-19

Esto dice el Señor, tu redentor,
el Dios de Israel:

«Yo soy el Señor, tu Dios,
el que te instruye en lo que es provechoso,
el que te guía por el camino que debes seguir.
¡Ojalá hubieras obedecido mis mandatos!
Sería tu paz como un río
y tu justicia, como las olas del mar.

Tu descendencia sería como la arena
y como granos de arena, los frutos de tus entrañas.
Nunca tu nombre hubiera sido borrado
ni arrancado de mi presencia».

Lectura del santo evangelio según san Mateo

Mt 11, 16-19

En aquel tiempo, Jesús dijo: «¿Con qué podré comparar a esta gente? Es semejante a los niños que se sientan en las plazas y se vuelven a sus compañeros para gritarles: ‘Tocamos la flauta y no han bailado; cantamos canciones tristes y no han llorado’.

Porque vino Juan, que ni comía ni bebía, y dijeron: ‘Tiene un demonio’. Viene el Hijo del hombre, y dicen: ‘Ése es un glotón y un borracho, amigo de publicanos y gente de mal vivir’. Pero la sabiduría de Dios se justifica a sí misma por sus obras».

“Al ver a estos niños que tienen miedo de bailar, de llorar, de todo, que piden seguridad en todo, pienso en estos cristianos tristes que siempre critican a los predicadores de la Verdad, porque tienen miedo de abrir la puerta al Santo. Espíritu. Oremos por ellos, y oremos también por nosotros, para que no nos convirtamos en cristianos tristes, cortando la libertad del Espíritu Santo para venir a nosotros mediante el escándalo de la predicación». (…) Es impactante que Dios nos hable a través de hombres con limitaciones, hombres pecadores: ¡es impactante! Y es aún más impactante que Dios nos habla y nos salva a través de un hombre que dice ser Hijo de Dios, pero termina siendo un criminal. Eso es impactante». (Santa Marta 13 de diciembre de 2013)